¿Qué empresa, digna de confianza para accionistas e inversores, presentaría sus productos y planes comerciales excluyendo a más de la mitad de sus potenciales clientes? Ridículo ¿no? Pues pasa diariamente y se acentúa con la prevalencia creciente de las tecnologías digitales en todos los ámbitos de nuestra economía. Diariamente se producen productos que ignoran la diversidad y la inclusión, sesgando desde sus raíces. Sus especificaciones no aprovechan el abanico de realidades que corresponde al día a día de sus clientes. ¿Deberían tener analistas? ¿obtener informaciones que representen la diversidad e inclusión de nuestras sociedades y sus miembros?