Ante la falta material sanitario, En Aranda, la compañía ha impreso más de 500 pantallas de protección y 300 salva-orejas que ya han sido repartidos en hospitales, residencias, etc. También ha fabricado más de 30 válvulas para adaptar máscaras de bucear y conseguir “crear” respiradores. En este contexto de crisis sanitaria, en el que la industria alimentaria desempeña un importante papel, Pascual se ha puesto a disposición de las autoridades para colaborar en lo necesario, tanto con producto, como con material sanitario.