En este artículo pondré en valor los datos obtenidos de la encuesta lanzada por Diario Responsable, enmarcándolos en un contexto más global y sobre todo en un contexto de crisis económica que es mucha más que una inflexión en le ciclo económico, sobre todo por la exclusión social que está generando, alcanzando unos niveles impensables en un país europeo.
El concepto “consumo responsable” es percibido claramente por la mayoría de los encuestados (96%), manifestando que entienden por consumo responsable el consumo que considera los impactos que el mismo puede generar sobre el medio ambiente y la sociedad.
Es evidente que los consumidores españoles están cambiando sus hábitos de consumo y de compra, ya que, con carácter general, la renta familiar ha disminuido.
La respuesta a la encuesta de DR nos da un perfil profesional claro: 83% de las personas que han contestado, han declarado estar en activo laboralmente en la actualidad, frente a un 17% que manifiesta estar en el paro.
Importante también considerar que la mayoría de las respuestas (41%) proceden del segmento de edad 31-40 años, seguido del de 41-50 años con un 19% y con un 15% cada uno el de 21-30 y de 51-60 años
Los bloques de edad hasta 21 años (4%) y el de más de 65 años con un 5% han sido los que menos han contribuido a los resultados de esta encuesta.
En los resultados de la Encuesta de DR se vislumbra una situación todavía positiva, ya que a la pregunta de si el precio es fundamental en su decisión de compra o contratación de servicios, un 45% afirma que si y un 55% afirma que no (porque tiene en cuenta otras variables).
Complementando la anterior pregunta se va viendo hacia donde caminan los hábitos de los ciudadanos, ya que un 96% afirma comprar o contratar servicios teniendo en cuenta la relación calidad/precio de los mismos, frente a un 2% que se manifiesta en contra de este binomio y un 2% que prefiere no contestar.
Se podría afirmar que el segmento mayoritario de población que ha contestado la encuesta (31-50 años y laboralmente en activo) corresponde con lo que se ha venido denominando “clase media”, clase que va desapareciendo poco a poco, ya que los que aún disponen de trabajo asalariado han visto rebajados sus salarios de forma importante (y no solo los funcionarios).
Puesto que las posibilidades de incrementar la renta familiar en un futuro inmediato, no parecen muy realistas para la mayoría de los ciudadanos españoles, es importante conocer su opinión sobre sus tendencias en el ámbito del consumo para comprar productos o contratar servicios.
Si consideramos que SE PUEDE llegar a ser un consumidor responsable:
Comprando de forma positiva.- favoreciendo productos “responsables” (fabricados o suministrados por empresas socialmente responsables) ya sean ecológicos, provengan de Comercio Justo o que no hayan contaminado en su proceso de elaboración y
Evitando comprar productos o servicios que promuevan la discriminación, la contaminación o la pobreza y
No comprando productos o servicios de una empresa y sus subsidiarias si desaprobamos una de sus marcas o productos
Es evidente que los consumidores necesitamos INFORMACIÓN PARA INFLUENCIAR EL MERCADO. Ahora bien, los europeos en general y los españoles en particular, nos sentimos DESINFORMADOS sobre las empresas. Según el Eurobarómetro (Comisión Europea) el 79% de las personas en el marco de la Unión Europea (datos consolidados) dice sentirse interesado en saber que hacen las empresas por tener un comportamiento responsable, pero solo un 36% afirma estar bien informado al respecto.
Si tenemos en cuenta los datos que se desprende de la encuesta de DR, contestado por un 77% de ciudadanos que residen habitualmente en España y un 13% en América Latina, las cifras son desalentadoras: un 92% de los encuestados afirman que NO DISPONE DE INFORMACIÓN SUFICIENTE para saber si un producto o servicio es susceptible de considerarse responsable.
Igualmente un 94% de ciudadanos, afirman que NO DISPONEN de información SUFICIENTE sobre LAS EMPRESAS que comercializan sus productos o servicios en el mercado.
También existe una clara preferencia (65%) por la compra de productos españoles o la contratación de servicios con empresas españolas, frente a un 17% que prefiere lo contrario y un 17% que decide no manifestarse.
A pesar del difícil contexto económico actual un 83% de los encuestados por DR afirma que utiliza como elemento de compra la posible reutilización de los productos o su mayor eficiencia energética y un 82% tienen en cuenta criterios de responsabilidad medioambiental en sus compras.
Un 96% de los ciudadanos (Encuesta DR) considera que a través de las decisiones de compra o contratación de servicios sed puede contribuir a una sociedad más justa y un 97% de los mismos considera que a través del consumo se pueden generar cambios sociales
Las conclusiones parecen evidentes:
Es absolutamente necesario eliminar ASIMETRÍAS EN LA INFORMACIÓN y por lo tanto disponer de la información adecuada para que los consumidores podamos influir en el mercado de forma consciente
Saber que tenemos en nuestras manos, como consumidores, la posibilidad de CAMBIAR COMPORTAMIENTOS EMPRESARIALES inadecuados y CONTRIBUIR por tanto a generar los CAMBIOS SOCIALES NECESARIOS para alcanzar una SOCIEDAD MÁS JUSTA.
Maria Rodriguez
Experta Internacional en Consumo Responsable y RSE
6 de diciembre de 2013