Publicado el
El proyecto “Maji Ni Uhai” de la organización Amref y Ferrovial ha permitido que 50.000 tanzanos de la región del Serengeti tengan acceso a agua potable con la construcción de pozos e infraestructuras públicas en colaboración con las autoridades y comunidades locales.
MADRID, 10



El proyecto “Maji Ni Uhai” de la organización Amref y Ferrovial ha permitido que 50.000 tanzanos de la región del Serengeti tengan acceso a agua potable con la construcción de pozos e infraestructuras públicas en colaboración con las autoridades y comunidades locales.

Con esta iniciativa, que la pasada semana fue galardonada por la Comisión Europea en los Premios Europeos de Medio Ambiente en la categoría de ‘Cooperación internacional para el desarrollo sostenible’, se han construido 30 pozos, 2 sistemas de gravedad con puntos de distribución, 2 embalses, tanques de almacenamientos y 270 letrinas.

Francisco Polo, director de Comunicación de la empresa de ingeniería, destacó este jueves en rueda de prensa que gracias al proyecto -en el que han participado profesionales de la compañía como voluntarios- permite no sólo el acceso al agua potable sino una mejora en las condiciones de salud e higiénicas de la población.

Por su parte, Alfonso Villalonga, presidente de Amref España, señaló la importancia de la implicación de las comunidades locales con la creación de comités de agua y salud que permitirán el mantenimiento de las instalaciones una vez finalizado el proyecto.

En este sentido, una veintena de voluntarios de la compañía se han desplazado al país africano para entre otras cosas realizar cursos de formación de técnicos, y se están llevando a cabo acciones para educar, sensibilizar y promover buenas prácticas en el uso del agua y de las instalaciones sanitarias que se han construido.

El proyecto, que se puso en marcha en 2008 y finalizará en 2011, ha supuesto una inversión de 1,8 millones de euros. Entre sus resultados se conseguirá que el 100% de los edificios públicos cuenten con abastecimiento de agua y que la distancia recorrida por la población para obtener el líquido pase de las 4 horas a los 30 minutos.

Villalonga afirmó que esta iniciativa consigue de forma indirecta una mejora en la calidad de vida de la población local, puesto que mejora las condiciones de educación y consigue liberar a la población infantil de una tarea como es la búsqueda de agua que conllevará una mayor disponibilidad para acudir a la escuela.

Por último, Cristina García Orcoyen, directora de la Fundación Entorno, destacó los resultados de un proyecto sido fruto de la alianza público-privada, que ha contado con resultados tangibles y medibles.

En este artículo se habla de:
Opinión

¡Comparte este contenido en redes!

 
CURSO: Experto en Responsabilidad Social Corporativa y Gestión Sostenible
 
Este sitio utiliza cookies de terceros para medir y mejorar su experiencia.
Tu decides si las aceptas o rechazas:
Más información sobre Cookies