Luis Alejandro Mejía, Lead Climate Officer de BID Invest, compartió su perspectiva sobre el crecimiento de las finanzas sostenibles en América Latina, resaltando que el enfoque debe ir más allá del funcionamiento actual para convertirse en una tendencia generalizada. "El avance ha sido significativo, y eso es una buena noticia", señaló y contó que, recientemente, en un congreso de finanzas sostenibles en Argentina, se vivió un ambiente de gran optimismo respecto al futuro de las finanzas responsables en América Latina y el Caribe. Mejía observó que los temas más relevantes son el interés en la agenda social y el compromiso ambiental. “Aunque es un mercado naciente, América Latina y el Caribe representan ya el 28% de todas las emisiones globales en finanzas sostenibles, integrando tanto la agenda verde como la social en sus instrumentos de deuda", explicó.
Además, subrayó que la sostenibilidad es clave en las calificaciones de riesgo país y empresarial, mejorando la gobernanza y el atractivo de las empresas y los países para los inversionistas. "La percepción de sostenibilidad tiene una relación directa con la preferencia de los mercados para invertir en determinadas empresas y regiones”, comentó Mejía.
Mejía también destacó el concepto de "transición justa" como esencial en el desarrollo de la economía sostenible. "Es una labor fundamental pensar cómo nos movemos hacia una economía de bajas emisiones sin dejar a nadie atrás, especialmente a las poblaciones vulnerables". Este enfoque asegura que el cambio sea inclusivo y que todos, especialmente aquellos en situación de mayor riesgo, puedan beneficiarse de una economía sostenible.
En Guatemala, BID Invest ha impulsado las finanzas sostenibles de la mano de Centrarse, un programa que comenzó en 2021 para incentivar el desarrollo sostenible en el país. “Decidimos establecer un foro de finanzas sostenibles que reúne a diversos actores con el propósito de definir cómo las empresas pueden apoyar las metas de desarrollo y cómo las finanzas sostenibles juegan un rol clave en este objetivo”, explicó Mejía. Esta iniciativa ha permitido una colaboración enriquecedora entre empresas y bancos locales. Según Mejía, la región ha evolucionado desde emitir bonos verdes o sociales hacia una integración completa de temas sociales y medioambientales. “La sostenibilidad ofrece un equilibrio entre riesgo y oportunidad, y la integración de estas agendas es cada vez más evidente”, concluyó.