El trabajo verde se refiere a trabajos que tienen un enfoque en la sostenibilidad y la protección del medio ambiente. Estos trabajos pueden estar en una variedad de industrias, desde energía renovable y tecnología hasta agricultura y construcción. Algunos ejemplos de trabajos verdes incluyen:
Cabe entonces preguntarnos, ¿Por qué es importante el trabajo verde? El trabajo verde es importante porque ayuda a reducir el impacto ambiental de nuestras actividades diarias. A medida que la población mundial crece y la demanda de recursos aumenta, es cada vez más importante encontrar formas sostenibles de satisfacer nuestras necesidades. El trabajo verde también puede ayudar a crear empleos y estimular el crecimiento económico en áreas que han sido afectadas por la desindustrialización.
Se espera que el trabajo verde sea una de las áreas de mayor crecimiento en los próximos años. A medida que la sociedad se vuelve más consciente de la importancia de la sostenibilidad, habrá una mayor demanda de trabajos que promuevan la sostenibilidad y reduzcan el impacto ambiental. Sin dudas, ruptura es la palabra que resume lo que está ocurriendo en el mercado laboral mundial, que se ve constantemente remodelado por la revolución digital, los esfuerzos por descarbonizar frente a la crisis climática y otros cambios geopolíticos y sociales.
Según el Informe sobre el Futuro del Empleo 2023 del Foro Económico Mundial, en los próximos cinco años, se espera que casi un cuarto de los puestos de trabajo (23%) cambien mediante un crecimiento del 10,2% y un descenso del 12,3%. Según la investigación citada los empresarios prevén la creación de 69 millones de nuevos puestos de trabajo y la supresión de 83 millones, lo que supone una disminución neta de 14 millones de empleos, es decir, el 2% del empleo actual.
Las macrotendencias, como la transición verde, las normas ESG y la localización de las cadenas de suministro, son los principales motores del crecimiento del empleo, mientras que los retos económicos, como la elevada inflación, la ralentización del crecimiento económico y la escasez de suministros, suponen la mayor amenaza. El avance en la adopción de la tecnología y la creciente digitalización provocarán importantes cambios en el mercado laboral, con un saldo neto positivo en la creación de empleo.
La publicación advierte que, mientras que la sostenibilidad y las revoluciones técnicas están provocando un aumento de las funciones digitales y basadas en la sostenibilidad, se espera que disminuya la prevalencia de algunas funciones más tradicionales.
Del mismo modo, la creciente influencia de la automatización, las tecnologías de sensores y los servicios en línea están reduciendo la necesidad de empleados de servicios postales, cajeros y taquilleros y personal de introducción de datos. Se prevé que cada una de estas ocupaciones se reduzca en más de un tercio en los próximos cinco años.En cuanto a la mayor pérdida de puestos de trabajo en términos absolutos, los administrativos de datos son los que salen peor parados, con una pérdida prevista de 8 millones de empleos en cinco años, seguidos de los secretarios administrativos y ejecutivos, y los empleados de contabilidad, teneduría de libros y patrullas. Estas tres ocupaciones juntas representan más de la mitad de la destrucción total de empleo prevista, según el informe El futuro del empleo 2023.
Como contracara, para compensar las pérdidas de empleo previstas, los esfuerzos mundiales de descarbonización en respuesta a la crisis climática están dando lugar a una gran cantidad de empleos verdes en todos los sectores e industrias. Un escenario de recuperación verde podría generar en torno a un 3,5% de crecimiento adicional del PIB mundial y una ganancia neta de empleo de 9 millones de nuevos puestos de trabajo cada año, según datos de la Agencia Internacional de la Energía. Según la publicación, la transición ecológica podría crear 30 millones de puestos de trabajo en todo el mundo en el ámbito de las energías limpias, la eficiencia y las tecnologías de bajas emisiones de aquí a 2030. Sin embargo, aunque en los últimos cuatro años se ha registrado un crecimiento continuado de los empleos verdes, la reconversión y la mejora de las cualificaciones hacia competencias verdes no sigue el mismo ritmo.