Contribuir a la integración social y laboral de las personas con discapacidad intelectual en el sector de la hostelería (cadenas de restaurantes, cafeterías, restaurantes especializados, hoteles, etc.) y sensibilizar de una manera eficaz a la sociedad siendo este sector muy visible en todos los ámbitos sociales. Ése es el objetivo del proyecto 'En bandeja'. Formulado e implementado por el Servicio de Empleo de Down Madrid que cuenta con el apoyo de Fundación Montemadrid y de Bankia, también tiene la colaboración de empresas del sector como Km de pizza, Harina, Horno de Babette, Starbucks, que ya tienen experiencia de la contratación de personas con discapacidad en el sector de la hostelería.
Con él, se logra un doble impacto. Por un lado, la inserción laboral de personas con dificultades de empleabilidad, y por otro, la sensibilización que supone la incorporación de trabajadores con discapacidad intelectual en entornos muy visibles y accesibles como los sectores de la hostelería. Además se da respuesta a la demanda puesto que este sector atrae a muchos jóvenes que se encuentran en busca de empleo y las experiencias que están siendo todo un éxito.
En una entrevista publicada por 'En Acción, la huella social de Bankia' (marca que acompaña a todos los proyectos sociales relacionados con el empleo, formación, vivienda, desarrollo rural, discapacidad y patrocinio social), Begoña Escobar, coordinadora de Empleo de Down Madrid, explica el trabajo que hacen, qué cualidades tienen y, sobre todo, qué valor aportan estas personas al entorno de trabajo.
Por ejemplo, cuando habla del valor que aportan, dice que "las personas con síndrome de Down, en general, son trabajadores con una alta motivación y afán de superación, con gran disposición por aprender, constantes, tenaces, responsables, puntuales, cuidadosos y perfeccionistas con su trabajo". Y añade que, además, "muchas de las empresas que han contratado a trabajadores con síndrome de Down manifiestan que ayudan a mejorar el clima laboral y la imagen de la empresa, favoreciendo así el desempeño laboral".
Otra de las cosas que destaca Escobar es que "la empresa tiene un papel principal como posibilitadora del proceso, ya que gestionará los apoyos y recursos disponibles en el entorno laboral, para potenciar el aprendizaje y adaptación del trabajador con síndrome de Down. Por lo tanto, frente a esta resistencia inicial, se deben plantear por parte de los Servicios de Empleo Especializados, acciones estratégicas de información, sensibilización y ruptura de estereotipos". Y subraya que "esta sensibilización genera en el entorno empresarial una visión más positiva y realista sobre las capacidades y fortalezas de los trabajadores con síndrome de Down, y ayuda a desmitificar concepciones y estereotipos previos sobre sus competencias y posibilidades laborales".
También dice algo muy importante y es que "el empleo constituye una importante vía de desarrollo personal y una incorporación plena a nuestra sociedad y esto no es ajeno al colectivo de personas con síndrome de Down, para quienes el trabajo es también un medio de realización personal. Las personas con síndrome de Down consideran el trabajo como algo muy importante y necesario para sus vidas, tomando cada día un papel más activo en la sociedady con la posibilidad de incorporarse al mercado de trabajo".
Según los datos de Down Madrid, la tasa de actividad laboral para el colectivo de personas con discapacidad intelectual en España es de 27,8%, 31 puntos inferior al de la población en general, y por lo que respecta a las personas con síndrome de Down, solo un 5% de este colectivo en edad de trabajar lo hace en entornos ordinarios. "Por este motivo, es necesario proporcionar a las personas con discapacidad intelectual una serie de apoyos orientados a una formación adecuada, una selección de puestos ajustada a sus competencias, una prospección dirigida y un acompañamiento, asesoramiento y mantenimiento en el puesto de trabajo para lograr que se incorporen al mercado laboral con éxito", dicen.
