El Informe AidWatch2015 realizado por Concord, la red de ONGD europeas, analiza la calidad de los recursos que Europa emplea para mejorar las condiciones de vida de las personas fuera del continente, y alerta de que en 2014 más de 7.000 millones de € nunca llegaron a los países empobrecidos porque se quedaron en Europa. Asimismo, se critica que los países euroepos sean incapaces de alcanzar el compromiso del 0,7%.
El documento titulado “Mirando al futuro, sin olvidar el pasado” alerta de la peligrosa tendencia de computar como Ayuda al Desarrollo partidas que no contribuyen a ello porque nunca llegan a los países de destino. Eso significa que cuestiones como la atención de población refugiada en Europa; el pago de estudios en Europa de personas procedentes de países empobrecidos o la condonación de la deuda no deberían ser tenidos en cuenta en el cómputo, sino que deberían financiarse con recursos distintos a los de la política de cooperación. "Hacerlo, significa inflar la ayuda", señalan los autores.
Si se tiene en cuenta esta ayuda inflada en las cifras españolas, los porcentajes destinados a cooperación descienden del 0,14% al 0,13%, lo cual significa que el 20% de los recursos que invierte España son de baja calidad con un cuestionable impacto en la lucha contra la pobreza y la desigualdad, y situando al país en niveles similares a países como Croacia o Eslovenia.
"A pesar de que Rajoy defiende que España es el país de Europa con mayor crecimiento económico, el compromiso con la cooperación no se ha hecho realidad", apuntan desde Concord. Los recursos financieros han caído tanto en términos reales (un 70%) como en lo que se refiere a la calidad de la ayuda; las reformas llevadas a cabo no han derivado en una mejor gestión de la ayuda. La Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo afronta una situación extrema: continúa perdiendo recursos para asistir a los 23 países prioritarios y responder a las crisis humanitarias.
Un 70% de los fondos de Ayuda Oficial al Desarrollo se destinan a aportaciones obligatorias destinadas a instituciones multilaterales, incluida la UE –una situación que deja clara evidencia de la falta de compromiso político con la cooperación para el desarrollo.
Puede consultar el Informe AidWatch2015 en la web de CONCORD
Imagen AFP
