La vacunación masiva es la esperanza de que se acabe la pesadilla que estamos viviendo desde hace un año. Sin embargo, muchos gobiernos no están comprendiendo la importancia de que no solo una parte de la población se vacune, sino por el contrario, que sea de manera universal. A pesar del amplio apoyo ciudadano, los gobiernos del G7 siguen oponiéndose a una exención de los derechos de propiedad intelectual de las vacunas contra la COVID-19.