Hoy en día la diversidad es más que una mera palabra. No solo se trata de cumplir la ley o de valorizar la imagen de la empresa en la sociedad. Se trata de reconocer y valorar la multiplicidad de perspectivas, experiencias y habilidades que cada individuo aporta a la mesa. Es un compromiso integral que trasciende las fronteras de la oficina y se convierte en una filosofía empresarial y en una verdadera ventaja competitiva. Porque solo un equipo diverso y complementario será capaz de tener ideas innovadoras y disruptivas.