En los últimos seis años, casi el 70 % de los países en desarrollo que contrajeron deuda externa con el FMI enfrentaron dificultades para sostener su crecimiento. En 2023, destinaron en promedio el 16 % de sus ingresos por exportaciones al pago de la deuda, según la titular de la entidad para comercio y desarrollo, quien insta a reformar el sistema financiero global para priorizar el bienestar de las personas y el desarrollo sostenible.