La compañía está desmantelando ya dos de sus centrales de carbón en la península, Compostilla (León) y Andorra (Teruel), y está a la espera de las autorizaciones administrativas para las centrales de As Pontes (Galicia) y Litoral (Almería).Todos los procesos de desmantelamiento se han diseñado siguiendo principios de economía circular, dando prioridad al empleo local, y planteando un futuro renovable en esas mismas zonas.