La renaturalización de ciudades es un enfoque que busca reintroducir elementos naturales en entornos urbanos para mejorar la calidad de vida de los residentes y promover la sostenibilidad ambiental. Consiste en la creación o restauración de áreas verdes, como parques, jardines, corredores biológicos y espacios naturales dentro de la infraestructura urbana. Se trata de una práctica de gran importancia ya que:
Conscientes de la importancia de esta práctica medioambiental, la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) ha resuelto la convocatoria de ayudas para la renaturalización de ciudades correspondiente a 2022, con la selección de 19 proyectos de entre las 64 candidaturas presentadas. Las iniciativas seleccionadas, lideradas por administraciones locales de todo el país, contarán con ayudas de entre 2 y 4M€, con un máximo de cofinanciación del 95%, gracias a los 62M€ de dotación de la convocatoria. Todos los proyectos deberán concluir antes del 31 de diciembre de 2025.
El objetivo de la convocatoria, destinada a ayuntamientos de capitales de provincia y otras ciudades de más de 50.000 habitantes, solas o en agrupación con ONG, entidades científicas y/o municipios limítrofes de más de 20.000 habitantes, es obtener un resultado transformador y un impacto duradero mediante proyectos que contribuyan a un cambio del modelo de ciudad, basado en la sostenibilidad, el incremento de la infraestructura verde y la conectividad de los espacios verdes y azules y el fomento de las Soluciones basadas en la Naturaleza (SbN). De este modo, se conseguirá aumentar la biodiversidad e impulsar la adaptación al cambio climático de los entornos urbanos y mejorar la salud y la calidad de vida de sus habitantes.
Según informaron desde el MITECO, los proyectos seleccionados pertenecen a ciudades de 12 comunidades autónomas: Málaga y Utrera (Andalucía), Zaragoza (Aragón), Torrelavega (Cantabria), Segovia y Zamora (Castilla y León), Ciudad Real (Castilla-La Mancha), Mataró, Sant Boi de Llobregat, Reus y Viladecans (Cataluña), Pinto y Rivas Vaciamadrid (Comunidad de Madrid), Benidorm y Valencia (Comunidad Valenciana), Santiago de Compostela (Galicia), Las Palmas de Gran Canaria (Islas Canarias), Barakaldo (País Vasco) y Molina de Segura (Región de Murcia).
Las ayudas se orientan a la acción, por lo que todos los proyectos desarrollarán actividades de implementación directa en el territorio, ya sea a nivel de ciudad, área periurbana y urbana, barrio, edificio o manzana. Para favorecer la sostenibilidad en el tiempo de las actuaciones, éstas han de enmarcarse obligatoriamente en planes o estrategias municipales a largo plazo, bien ya existentes, bien incluidas en el proyecto presentado. Todos ellos incluyen de manera transversal planes de Gobernanza y Participación y de Comunicación y Sensibilización con el objetivo de que la ciudadanía y los agentes clave en el ámbito de los proyectos, estén informados y puedan participar activamente en el cambio de modelo de su ciudad. Además, con el fin de contribuir a la generación de conocimiento sobre renaturalización urbana y poder transferirlo y replicarlo en otros contextos, los proyectos incluyen un plan de medición y seguimiento de indicadores de impacto de las acciones a realizar.