Esta definición va a sustituir a "unión legítima entre un hombre y una mujer". Rápidamente a dicha voluntad respondió el Foro de la Familia, que aseguró que es una modificación "poco seria y muy ideológica". Curiosos argumentos en contra, pues los diccionarios deben responder a la realidad social y no a cuestiones ideológicas, cierto. Pero es que la realidad social es que el matrimonio ya no es necesariamente heterosexual, en cambio es ideológico el creer que sí debe ser así.
Esperemos ver pronto también dicho cambio en el DRAE, pues las cosas cambian, y las palabras también.