“No dejes la solidaridad en manos del Estado”, suele decirse desde algunas fuentes del voluntariado social. Es verdad, pero no es toda la verdad. Veamos.
Los pilares de la justicia social son responsabilidad del Estado: Educación y Sanidad universales, gratuitas y de calidad para que todos los ciudadanos seamos iguales en derechos básicos. Seguridad Social con pensiones sostenibles y suficientes. Sistema de atención a los mayores(Dependencia). Subsidios a la pobreza económica y a la subsistencia familiar. Ayudas a la vivienda. Servicios Sociales diversos a familias desestructuradas, integración de inmigrantes, ayuda a drogodependientes, menores de acogida, etc, etc.
Pero el ejercicio de esas políticas y la aplicación de muchas de ellas depende de la solidaridad social, de la voluntad de nuestros semejantes, de las organizaciones de voluntariado. A ellas se refiere la frase del principio de esta nota. El estado necesita los tentáculos sociales de la solidaridad. Sin ellos, no llega a la justicia social.
