La semana pasada se aprobó una reoslución con 310 votos a favor, 155 en contra y 100 abstenciones, en la cual las y los eurodiputados piden a la Comisión una estrategia eficaz para redistribuir, reubicar y relocalizar industrias en Europa. Destacan la importancia de mejorar las capacidades de fabricación de la Unión en tecnologías estratégicas clave, como la energía solar y eólica, las bombas de calor y las baterías. En respuesta al “Plan industrial del Pacto Verde” para la era de cero emisiones, las y los eurodiputados piden a la Comisión una estrategia eficaz para redistribuir, reubicar y relocalizar industrias en Europa.
Además, los parlamentarios demandan adaptarse a la expansión y la comercialización de tecnologías estratégicas para cerrar la brecha entre la innovación y la implantación en el mercado. Por otra parte, afirman que es preciso desarrollar procedimientos de autorización rápidos y previsibles para el establecimiento de nuevos proyectos de energía renovable lo antes posible.
La resolución sostiene que el objetivo general de la política de la UE debe ser garantizar el liderazgo europeo en tecnologías de energía limpia y mejorar la base industrial existente en Europa, al tiempo que contribuye a su transformación para producir empleos de calidad y crecimiento económico para alcanzar los objetivos del Pacto Verde. Para lograrlo, advierten que la UE debe tomar medidas para acelerar las capacidades de producción de una energía asequible, segura y limpia que deberá ponerse a disposición de la industria. También resaltan la importancia de aumentar el ahorro energético y las medidas de eficiencia energética. En este sentido, el texto hace hincapié en la importancia de garantizar el acceso a las materias primas fundamentales como requisito previo para abordar las transformaciones ecológica y digital. Los proyectos europeos estratégicos necesitan una concesión de permisos más rápida y transparente, subraya también.
Por otra parte, las y los eurodiputados quieren que la Comisión adopte una postura más firme sobre la lucha contra la competencia desleal a escala mundial causada por ayudas estatales injustificadas. Expresan su preocupación por las disposiciones de la Ley de reducción de la inflación de los Estados Unidos (IRA) que discriminan a las empresas de la UE. La Comisión debería trabajar con EEUU para garantizar que la UE esté cubierta por las excepciones previstas en el IRA para los países con una cooperación de libre comercio, y que los productos europeos sean elegibles para créditos fiscales igual que los estadounidenses.
En esta misma línea, se afirma que un futuro Fondo para la Soberanía Europea debería tener como objetivo evitar la fragmentación causada por los regímenes nacionales de ayuda estatal descoordinados y garantizar una respuesta eficaz y verdaderamente unida a la crisis, insisten los eurodiputados. El Fondo debe reforzar la autonomía estratégica de la UE y las transiciones ecológica y digital, integrarse en el presupuesto de la UE a largo plazo y movilizar inversiones privadas.
Finlamente, la resolución propone que las normas sobre ayudas estatales de la UE también deben simplificarse y permitir flexibilidad, pero deben ser específicas, temporales, proporcionadas y coherentes con los objetivos políticos de la UE. Los eurodiputados se oponen con firmeza a cualquier intento de flexibilizar las normas sobre ayudas estatales sin ofrecer una solución europea a todos los Estados miembros que no cuentan con gran capacidad presupuestaria para financiar ayudas estatales masivas.
