Aspectos positivos y negativos de la Agenda 2030, según Manos Unidas
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Nueva Agenda para el Desarrollo Sostenible o Agenda 2030 marca los nuevos 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y 169 metas, que sustituyen a los ocho ODM (Objetivos de Desarrollo del Milenio) establecidos por la comunidad internacional en el año 2000 y que en este año 2015 finalizan.
Nueva Agenda para el Desarrollo Sostenible o Agenda 2030 marca los nuevos 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y 169 metas, que sustituyen a los ocho ODM (Objetivos de Desarrollo del Milenio) establecidos por la comunidad internacional en el año 2000 y que en este año 2015 finalizan. Manos Unidas ha estudiado en profundidad este documento que se aprobará este próximo domingo en Nueva York y ha expuesto aquelllos aspectos negativos y positivos del mismo.
Aquí se reflejan:
Cinco aspectos positivos de la Agenda 2030
Por primera vez confluyen Desarrollo y Medio Ambiente, entendiendo que pobreza y sostenibilidad van necesariamente unidas.
La universalidad de los objetivos, que plantea que todos los países han de lograrlos.
Un nivel de ambición mucho mayor que los ODM, cuantitativa y cualitativamente.
Un potencial transformador a nivel global tratando de lograr nuevos resultados.
Los 17 objetivos incluyen 169 metas o indicadores, esenciales para dar seguimiento a los compromisos, constatar los avances o retrocesos y evaluar su evolución.
Cinco aspecto negativos de la Agenda 2030
La financiación: la Cumbre de Financiación para el Desarrollo, (Addis Abeba, julio) no abordó aspectos esenciales reclamados por la sociedad civil como el compromiso con el 0’7%, las nuevas fuentes de financiación, o el final de los paraísos fiscales.
El frágil nivel de compromisos de los Estados con los ODS: será voluntario, y por tanto, su aplicación en cada país dependerá de lo que cada Estado considere.
La adaptación que cada país haga de la Agenda 2030 decidiendo qué objetivos abordar y en qué perspectiva, amenaza uno de sus puntos fuertes: la “universalidad”.
Persiste un modelo de desarrollo basado en el crecimiento económico, sometiendo a la dimensión económica la social y ecológica, lo que es contrario al desarrollo sostenible.
Si bien la participación de la sociedad civil ha sido amplia y significativa en el proceso, no queda nada claro su papel en la implementación y evaluación de la nueva agenda.
Asimismo, Manos Unidas pide al presidente de gobierno Mariano Rajoy una mayor implicación del Gobierno Español para que se comprometa a impulsar un modelo de desarrollo centrado en las personas y hace una llamada pública a los líderes mundiales por una ecología integral.