En un mundo donde los datos se han convertido en uno de los activos más valiosos, la gobernanza de datos se presenta como una herramienta esencial para garantizar la seguridad, integridad y privacidad de la información. Con la creciente preocupación por la privacidad y la presión regulatoria, las organizaciones deben adoptar un enfoque sólido y estratégico en la gestión de datos para proteger tanto sus activos como la confianza de sus usuarios.