Ayer, 16 de octubre, se celebró el Día Mundial de la Alimentación. Con motivo de la efeméride, nace Together Against Hunger, un movimiento formado por expertos, activistas y otros actores de la sociedad civil que busca nuevas formas de luchar contra el hambre. El colectivo advierte que, a pesar de todos los avances de las últimas décadas en la lucha contra la desnutrición infantil, 45 millones menores de cinco años en el mundo sufren desnutrición aguda, y las predicciones apuntan a que esta cifra continuará creciendo en los próximos años. Los conflictos armados, el cambio climático, las consecuencias de la pandemia de la covid-19 y las desigualdades están impulsando el hambre hacia formas más complejas e interconectadas. En este escenario, la innovación y la financiación son claves para afrontar el desafío de la crisis alimentaria global.