Según los datos de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), desde 2014 se ha registrado la desaparición de 27 633 personas en el Mediterráneo. El Mar ha sido escenario de numerosas tragedias en las que migrantes han perdido la vida mientras intentaban cruzarlo en busca de una vida mejor. Estas tragedias han ocurrido principalmente en la ruta migratoria del Mediterráneo central, que abarca la zona entre el norte de África y Europa, especialmente Italia y Malta. Las personas que emprenden esta peligrosa travesía a menudo huyen de situaciones de conflicto, persecución, pobreza extrema o falta de oportunidades en sus países de origen. Para muchos, la única opción que ven es arriesgar sus vidas en un viaje incierto a través del mar.
La situación en el Mediterráneo y las muertes de migrantes continúan siendo un desafío importante para los países de la región y para la comunidad internacional en general. Se han implementado diversas medidas para intentar abordar este problema, como operaciones de búsqueda y rescate, iniciativas de cooperación entre países, esfuerzos para desmantelar redes de tráfico de personas y programas de desarrollo en los países de origen para mejorar las condiciones de vida y reducir las causas de la migración forzada. Las operaciones de búsqueda y salvamento llevadas a cabo por los Estados miembros no están cubiertas por un marco legal común de la UE, excepto si participan en operaciones lideradas por Frontex.
En este escenario que cada vez se torna más complejo, las y los eurodiputados quieren que la Unión Europea y los Estados miembros efectúen operaciones de búsqueda y salvamento más activas y coordinadas, con Frontex en un papel clave. Tras el debate en el pleno, el pasado miércoles 12 de julio, el Parlamento Europeo aprobó a mano alzada una resolución en la que pide a los Estados miembros y a Frontex que refuercen las operaciones proactivas de búsqueda y salvamento proporcionando suficientes buques, equipamiento y personal, y mejorando la coordinación, para contribuir eficazmente a salvar vidas.
Los Estados miembros deben recurrir a todos los buques que puedan ayudar en las operaciones de búsqueda y salvamento, incluidos los de las ONG, agrega el texto, que también insta a establecer una misión global de búsqueda y salvamento de la Unión ejecutada por las autoridades de los Estados miembros y Frontex.
Además, el Parlamento condena a los pasadores y traficantes de personas e insiste en que las vías seguras y legales, en especial el reasentamiento, son la mejor manera de evitar la pérdida de vidas humanas. Los eurodiputados animan a informar en terceros países, vía medios de comunicación y centros de enseñanza, de que la ruta por el Mediterráneo es mortal y peligrosa.
Concretamente, la resolución pide a la Comisión que facilite información exhaustiva sobre todo tipo de apoyo de la UE y sus Estados miembros a las guardias fronterizas y costeras de terceros países, como Libia, Turquía, Egipto, Túnez y Marruecos. Tras recordar que el desembarco de personas rescatadas en el mar debe efectuarse en lugares seguros, los eurodiputados piden que se evalúen las acusaciones de violaciones graves de derechos fundamentales por parte de la guardia costera libia y, si se confirma que se han producido, se ponga fin a la cooperación. Finalmente, los eurodiputados también solicitan a la Comisión que presente propuestas para condicionar la financiación a terceros países a su cooperación para la gestión de los flujos migratorios y en la lucha contra los traficantes de personas.
