El sector del transporte es uno de los principales responsables de la contaminación ambiental. Por ello, es crucial desarrollar estrategias de movilidad más sostenibles para combatir la crisis climática. Consciente de esta necesidad, la Comisión Europea (CE) ha aprobado 134 proyectos de transporte que recibirán una inversión superior a 7.000 millones de euros, financiados a través del Mecanismo «Conectar Europa» (MCE). Este es el mayor desembolso realizado en el marco del programa actual MCE Transporte.
Tras la aprobación de la lista de proyectos por los Estados miembros el día de ayer, la Comisión adoptará próximamente la decisión oficial de financiación. La Agencia Ejecutiva Europea de Clima, Infraestructuras y Medio Ambiente (CINEA) comenzará a preparar los acuerdos de subvención correspondientes. Cabe destacar que estos resultados son provisionales y sólo se considerarán definitivos una vez que la Comisión tome la decisión final sobre las adjudicaciones.
Aproximadamente el 83% de la financiación se destinará a proyectos que buscan cumplir los objetivos climáticos de la UE, mejorando y modernizando la red ferroviaria, las vías navegables interiores y las rutas marítimas dentro de la red transeuropea de transporte (RTE-T). De los 7.000 millones de euros, el 80% se invertirá en proyectos ferroviarios. Además, el Reglamento RTE-T revisado entrará en vigor el 18 de julio.
Entre los proyectos financiados se encuentran importantes iniciativas para mejorar las conexiones ferroviarias transfronterizas de la red básica RTE-T, incluyendo los corredores Rail Baltica en los países bálticos, la línea Lyon-Turín entre Francia e Italia, y el túnel Fehmarnbelt entre Dinamarca y Alemania. Asimismo, alrededor de 20 puertos marítimos en Irlanda, España, Finlandia, los Países Bajos, Alemania, Malta, Lituania, Chipre, Croacia, Grecia y Polonia recibirán apoyo para mejorar sus infraestructuras, permitiendo, entre otras cosas, el suministro de electricidad a los buques en puerto y el transporte de energía renovable.
En el ámbito de las vías navegables interiores, se realizarán obras para mejorar las conexiones transfronterizas entre Francia y Bélgica en la cuenca Sena-Escalda, y entre Rumanía y Bulgaria en el Danubio. También se financiarán mejoras en los puertos interiores de Austria, Alemania y los Países Bajos para fortalecer la red europea de ríos y canales y promover un transporte sostenible.
En el sector del transporte por carretera, se implementarán sistemas y servicios inteligentes de transporte cooperativo, así como nuevas zonas de estacionamiento seguras y protegidas, lo que incrementará la seguridad para todos los usuarios. Los proyectos de gestión del tránsito aéreo continuarán desarrollando el Cielo Único Europeo para hacer el transporte aéreo más eficiente, seguro y sostenible.
Finalmente, varios proyectos están destinados a aumentar la capacidad en los corredores de solidaridad entre la UE y Ucrania, facilitando el comercio entre ambos. Estos incluyen mejoras en la infraestructura de transporte por carretera en los pasos fronterizos entre Ucrania, Moldavia y Rumanía; obras para aumentar la capacidad del paso ferroviario Hungría-Ucrania; una nueva carretera en Polonia que se extenderá hasta la frontera con Ucrania; y estudios y trabajos para integrar el sistema ferroviario ucraniano en la red de la UE.