Vislumbrando la existencia humana como un tapiz, no hay muchos hilos que vibren y destaquen tanto como la libertad. Esta es la luz que brilla y lucha en los momentos de opresión. No se ha de pensar que dicha palabra se resigna a ser usada en las cámaras políticas o meramente utilizada en la escritura legal. Más bien, es una faceta fundamental de nuestra identidad cultural, profundamente ligada a nuestra sociedad.